Aguascalientes, Ags.- En el 2012,  llegaron a Aguascalientes remesas por 332 millones 717 mil dólares.

Ese monto equivalió al 29.45% del presupuesto de egresos que el Congreso autorizó ejercer al gobierno de Aguascalientes en el 2013.

El presupuesto de egresos se fijó en 14 mil millones 576,447 pesos. Para hacer la conversión de las remesas se tomó la cotización de 12.90 pesos por dólares que prevaleció en los bancos de Aguascalientes el viernes de la semana pasada.

Las remesas del 2012 por 332 millones 717 mil dólares representaron para Aguascalientes un incremento de 8.62% frente a las recibidas un año antes, según datos de Banco de México. En el 2011 llegaron 306 millones 322 mil dólares.

Para Aguascalientes, el mejor año en cuanto a las remesas ha sido el 2006, cuando las familias recibieron 379 millones 388 mil dólares. Así que el monto del 2012 fue inferior en 12.3% a ese máximo histórico.

En el 2012, sólo dos entidades del país recibieron más remesas que en cualquier otro año. Fueron Baja California y Baja California Sur. En las restantes, el porcentaje de descenso respecto al mejor año varía de manera considerable entre los diversos estados.

Tabasco, por ejemplo, recibió el año pasado 40.7% menos remesas que en el año 2006, el mejor de su historia para estos efectos. El descenso también ha sido considerable para Chiapas, con 39% menos que en 2006.

Sin embargo, en Sonora, recibió el año pasado apenas 1.59% menos remesas que en su mejor año, que fue 2007.

El conjunto de las 32 entidades del país reportó remesas familiares el año pasado por 22 mil 445 millones 755 mil dólares. Esta cifra fue inferior en 1.57% a la del 2011.

A nivel nacional, la mejor cifra ha sido la del 2007, cuando llegaron 26,058 millones de dólares.

Lo que estas cifras no revelan es si los descensos obedecen a que personas que vivían en los Estados Unidos decidieron regresar a sus lugares de origen dada la situación de la economía de ese país y por lo mismo ya no mandan dólares, o si la causa es porque quienes allá radican envían menos cantidad a causa del desempleo en la Unión Americana que afecta también a los procedentes de América Latina.