Aguascalientes, Ags.- Buenos propósitos más no cumplimiento de los mismos es lo que ha prevalecido en Aguascalientes en materia de transporte público urbano.
Estamos a poco más de tres meses de que concluya la presente administración estatal y cuando entregue la estafeta a quien lo suceda habrán pasado cuatro gobiernos sin que se cumpla algo que todos ellos se fijaron como objetivo: que los habitantes de Aguascalientes contáramos con un transporte público seguro y eficiente.
Desde los tiempos de Otto Granados Roldán, pasando por Felipe González González, Luis Armando Reynoso Femat y Carlos Lozano de la Torre, en alguno de los programas elaborados por sus respectivos gobiernos se planteó como uno de los objetivos crear las condiciones para hacer atractivo el uso del transporte público y disuadir así a los habitantes del uso del automóvil.
Sea en los códigos urbanos o en los planes estatales de desarrollo elaborados por cuatro sexenios se lee sobre modernizar y adecuar el equipamiento urbano asociados al transporte público, implementar un sistema de transporte urbano y suburbanos sustentable y multimodal, modernizar las unidades y crear infraestructura que facilite su movilidad.
Sin embargo, en esos años, en materia de movilidad de las personas la inversión se concentró en la construcción de puentes y en obras de remodelación de algunas calles y avenidas. Y es así que las unidades de transporte urbano público que hoy circulan por los municipios de Aguascalientes son viejas, incómodas y pocas para cubrir los requerimientos.
En el año 2015, en el estado de Aguascalientes se tenían registrados 1,421 autobuses (o también plataformas de camión de carga adaptadas para colocar asientos) para pasajeros. Si se compara la cifra con la del 2014, hubo un descenso de 32% o de 660 unidades.
Pero no sólo eso, los 1,421 autobuses del 2015 resultaron ser también menos que los del 2012. Así que mientras la población en este lapso de 3 años creció en 4.4%, el número de autobuses registrados en el estado bajó 28%, según datos del INEGI.
Cabe precisar que en estos datos que sobre el número de autobuses registrados en el estado aporta el INEGI no se especifica cuántos son para transporte urbano y cuántos para el transporte foráneo.
